Nos encontramos con nuestra guía, Annabelle
El acompañamiento es obligatorio para llegar a lo alto. Después de algunas explicaciones y de algunos datos al pie de la catedral, ¡no aguantamos ya las ganas! Nos quedan 400 escalones por delante…
¡Vamos a ello! Pasamos una puertecita de madera junto al coro alto. La escalera helicoidal es estrecha y los escalones de piedra son irregulares por el paso del tiempo. Cordones bien apretados, la aventura comienza.